Decorar una habitación puede ser una tarea sencilla, pero requiere un poco de atención cuando la idea es escapar de ese más de lo mismo “cama-mesita-armario”. Cuando tenemos un dormitorio pequeño principalmente, no es posible alejarse de estos elementos esenciales, pero con la elección correcta de colores es posible hacer que el ambiente sea más elegante y personalizado.
Y cuando pensamos en una habitación doble, tenemos una misión que cumplir: el estilo debe ser lo más unisex posible, para que el espacio no tenga la cara de una sola.
En el caso de los colores especialmente, cuanto más neutro, mejor, independientemente de si el estilo es rústico, contemporáneo, industrial, clásico o escandinavo.
Los colores también tienen una fuerte influencia en la transmisión de sensaciones y, para el dormitorio, pueden y deben adoptarse tonos que remitan a la tranquilidad, la relajación y la paz. Deben evitarse las opciones que llaman la atención. A continuación se muestran inspiraciones de paletas creativas utilizadas por profesionales brasileños para dejar la habitación de la pareja llena de armonía y originalidad.
1. El azul en medio de lo rústico
La neutralidad del blanco dio luminosidad a la habitación, que tiene un color azul oscuro que se resalta con la paja. El tono sobre tono, aquí en azul, es siempre una buena combinación para quitar la monotonía de un ambiente.
2. Sobriedad para la pareja seria
En este entorno se utilizaron varios tonos de gris, uno tendiendo al verde y el otro al grafito. La pared se encargaba de calentar la habitación, con su tono de madera tirado al acogedor marrón.
3. Un ambiente lleno de comodidad y alegría.
Los colores cálidos se pueden adoptar en las habitaciones, cuando se usan con precaución. En esta opción, el rojo se incluyó con sutileza en la tarjeta, y transformó la neutralidad de los colores principales en algo muy alegre y armonioso, sin agresividad, apareciendo en las mesas de noche y en los detalles de la alfombra.
4. ¿Es una habitación o un sueño?
Aquí el verde le dio toda la gracia al ambiente, utilizado en pequeños objetos y en el simple detalle de la manta. Todo esto combinado con la tan deseada alfombra chevron garantiza una decoración romántica y delicada al espacio.
5. Una opción industrial llena de personalidad
Las almohadas, principalmente Pied-de-poule, rompieron la masculinidad de la sala industrial. El estilo vintage utilizado en las pinturas y el cofre también ayudó en este contrapunto.
6. Un clásico lleno de refinamiento
Una vez más, el gris demuestra que reina en las opciones de color sobrias para el dormitorio. Con el blanco y el oro, no hay forma de no ser sofisticado y chic. Se podría decir que se trata de una paleta de comodines.
7. Tonos tierra + blanquecino
Inevitable no sentir la calidez del ambiente con este matrimonio de marrones con colores neutros. El ambiente fue calentado no solo por la alfombra, sino también por las opciones de esta paleta.
8. Los colores fríos son súper cómodos
El alto cabecero capitoné y el cuero de la cama vuelven a traer el clásico gris al dormitorio. Eso sí, no podía faltar el blanco para cerrar la composición con gran refinamiento.
9. ¿Quién dijo que el marrón y el azul no decoran?
El azul marino se utilizó de forma equilibrada, ya que es un color muy llamativo, y la idea aquí era mantener la suavidad de los tonos como punto culminante. Y, para eso, las variaciones marrones se adaptaron muy bien al estilo de la habitación, hasta que se volvió beige.
10. Calienta el espacio con creatividad
Los colores no necesitan resaltarse solo en las paredes; se pueden incluir en ropa de cama, almohadas y objetos decorativos.
11. Deja solo un detalle como destacado
En esta inspiración, una vez más la ropa de cama marcó la diferencia a la hora de dar color a la habitación. Fue ella quien aportó los tonos terrosos y cálidos, y mantuvo la sutileza en la decoración a pesar de que tenía un estampado llamativo.
12. Cuando menos es más
Puedes jugar con un solo color y su hebra de tonos para hacer que la habitación sea minimalista y equilibrada.
13. Un verdadero salón de reyes
Para aquellos que no quieren tener miedo de cometer errores, la elección de colores simples y neutros es la correcta. Y para romper la neutralidad, el papel pintado estampado le dio un toque de encanto.
14. Parejas modernas y desnudas
El amarillo se aplicó con estilo en este dormitorio, aunque no es un color muy utilizado para este tipo de ambiente. Pero él fue el responsable de hacer que la habitación fuera moderna y llena de personalidad.
15. El rosa también puede ser unisex
… usado en la medida correcta. En esta opción, el tono elegido fue el rosa cuarzo, tendencia de 2016. Los otros colores elegidos fueron los encargados de quitar cualquier feminidad de la decoración.
16.… ¡y azul también!
¿Cómo no amar esta combinación de colores dulces con blanco y gris? El panel de madera dejó la elección más madura y versátil.
17. Amarillo + gris = amor a la vista
La jovialidad de la pareja quedó estampada en el dormitorio con esta paleta de colores. Delicado, divertido y acogedor.
18. ¿Qué tal apostar por la uva?
Aunque el color no es el buque insignia de esta decoración, fue ella quien llenó de alegría el salón. Es en los pequeños detalles donde el entorno gana toda la diferencia necesaria para su personalización.
… Pero no renuncies a los sutiles toques de alegría en el entorno. Y en este caso, la turquesa jugó su papel a la perfección.
20. Lo importante es invertir en tus colores favoritos
Es posible crear un ambiente con los llamados colores secos (los que causan menos impacto) y brindar todo el confort y la tranquilidad que requiere un dormitorio. De hecho, este es un ambiente que no requiere mucha iluminación, por lo que aunque tu color favorito sea el oscuro, tiene una forma de favorecerlo a la hora de decorar.
Es más fácil entender la propuesta cuando la trasladamos de nuestra cabeza a un proyecto, o cuando vemos inspiraciones como las de arriba. Es posible dar la impresión que queremos al entorno con solo elegir los colores adecuados, y también incluir personalidad en lo que aparentemente podría ser algo muy simple. Nada como usar la creatividad y el buen gusto a nuestro favor en estos momentos.