Mucho más allá de diseñar un espacio, la arquitectura también puede influir en el bienestar mental de los ocupantes de un edificio. La neuroarquitectura es un campo de estudio que busca comprender cómo el entorno físico influye en el cerebro humano. Para conocer mejor el tema, la arquitecta Aline Schönfelder, especialista en el área, explica en qué consiste el término y su aplicación en la decoración.
¿Qué es la neuroarquitectura?
Aline explica que la neuroarquitectura “es una forma de acercar experiencias saludables a los usuarios, centrándose en la sensación que se quiere sentir en el entorno”. Según la profesional, determinados aspectos del entorno estimulan distintas emociones y sensaciones en el cerebro humano, por ello, “la neurociencia aporta pistas valiosas para los arquitectos sobre cómo crear y distribuir espacios que estimulen estos resultados y, así, entender mejor cómo responde el ser humano a el entorno son el entorno construido”.
Dice que el término es reciente, “surgió en 2003, tras la creación de la Academy of Neuroscience for Architecture en San Diego, California”. Ella complementa, explicando que esta ciencia estudia los desencadenantes que activan ciertas regiones del cerebro, como los colores, las texturas, la iluminación y cómo pueden influir en la reacción de las personas ante los entornos. Sobre los beneficios, la especialista afirma que “el entorno donde vive la persona influye en la calidad de vida, las relaciones, la productividad y el bienestar, por lo que cada espacio necesita ser diseñado de manera inteligente”. Como ejemplo, menciona que “usando las técnicas correctas, podemos aliviar el estrés y reducir la ansiedad”.
Cómo aplicar
Según Aline, “cada persona recibe y descodifica los estímulos del entorno de una manera única”, por lo que los proyectos basados en la neuroarquitectura deben tener en cuenta “cuál es el propósito del espacio y cuál es la sensación que se quiere tener en el entorno”. ”. No existe un único camino, sino que el arquitecto suele utilizar las siguientes técnicas:
sinestesia
“Una de las técnicas que más utilizo es el uso de los 5 sentidos”. Para el arquitecto, la mezcla de elementos que estimulan la visión, el tacto, el oído, el gusto y el olfato “genera estímulos y activa la memoria afectiva”. Por lo tanto, explore diferentes recursos y materiales en su proyecto.
diseño biofílico
“Es un gran aliado en los proyectos, ya que a través de elementos que hacen referencia a la naturaleza conseguimos aportar una mayor sensación de confort y bienestar”, explica. Además, Aline aclara que no se trata solo de utilizar muchas plantas, “se trata de colores, texturas, sonidos y olores que nos recuerdan a la naturaleza”. Y asegura que utilizar esta técnica correctamente tranquiliza a los ocupantes y además ayuda a aliviar la tensión muscular.
Organización
Para el especialista, la organización es uno de los pilares de la neuroarquitectura: “los ambientes organizados ayudan a que las ideas fluyan”. Invierta en artículos que ayuden a mantener el espacio ordenado, como cajas organizadoras, cajones, estantes, repisas y nichos.
decoración afectiva
“Objetos que cuentan una historia, de apego emocional, ayudan a las personas a tener sentido de pertenencia y activan el encanto”, dice Aline. Entonces, decora con objetos que tengan significado y valor para ti, pueden ser recuerdos de viaje, muebles familiares, fotos y otros recuerdos.
Encendiendo
Es importante prestar atención tanto a la iluminación natural como a la artificial. Dar preferencia a la entrada de luz natural, que hace que el cuerpo humano se sienta más cómodo. Además, “la correcta iluminación de los espacios ayuda en la calidad del sueño y, automáticamente, en nuestra longevidad”, destaca la profesional.
Hay varias posibilidades para aplicar la neuroarquitectura, pero para elegir las mejores estrategias “es necesario identificar el enfoque del proyecto y las necesidades reales de los usuarios”, dice Aline. Independientemente del objetivo, puedes transformar tu espacio de forma sencilla y hacerlo mucho más agradable para el día a día. Disfruta y descubre también cómo utilizar combinaciones de colores en tu decoración y explora diferentes sensaciones.